En esta ocasión Adidas, como con Argentina, cambió del negro al blanco para unificar la prenda superior con la inferior. Luego llegaría el broche de oro, el noveno póker de goles a lo largo de sus 21 años de carrera, el cual concretó casi sin oposición luego de que Abdulquddus Atiah diera un flojo rebote ante un remate del propio portugués al primer palo. Al fin y al cabo, este es el momento elegido por todos los clubes para cambiar de uniforme y estrenar una nueva equipación que les acompañe en cada partido.
