La temporada 1981/82, ya sin Kempes y sin Morena, se fichó a Frank Arnesen y Kurt Welzl y se incorporó al primer equipo el joven de 19 años Roberto Fernández, revelación del equipo que alcanzó la internacionalidad. La primera mitad de la temporada el equipo termina en un triste 14.º lugar a tan solo 3 puntos del descenso. La final se disputó el sábado 24 de junio de 1995 en el Santiago Bernabéu frente al Deportivo de La Coruña, que se clasificó por primera vez en su historia para una final.