Tras disputar sus dos primeras campañas en la élite con Estudiantes, Sergio Rodríguez dio el salto a la NBA en el verano de 2006. Brilló con la camiseta de los Portland Trail Blazers y después pasó con menos fortuna por las filas de los Sacramento Kings y los New York Knicks en una temporada deslucida que le trajo de vuelta a Europa en 2010. El Real Madrid le echó el lazo y el tinerfeño se convirtió en la quintaesencia del ‘lasismo’, una forma de entender el baloncesto que devolvió a la cima al conjunto de Chamartín.